¿Qué se considera acoso en el trabajo?

El acoso en el trabajo se define como la exposición intencional y persistente a comportamientos abusivos, amenazas, insultos, humillaciones, discriminaciones u otros comportamientos inapropiados que ponen en riesgo la dignidad de una persona en el lugar de trabajo. Estas conductas se llevan a cabo de manera regular, a menudo en un contexto en el que el agresor es una persona con una posición de poder o autoridad sobre el empleado, como un jefe o un compañero de trabajo.

El acoso en el lugar de trabajo puede manifestarse de muchas maneras, algunas de las cuales son más sutiles que otras. Puede incluir abuso verbal, como gritar o insultar a un empleado; abuso físico, como empujar o amenazar con violencia a un empleado; o abuso psicológico, como el hostigamiento o el acoso sexual. También puede incluir la exclusión de un empleado de un grupo de trabajo, la discriminación en la asignación de tareas, el rechazo de la contribución de un empleado a la toma de decisiones, el hostigamiento por parte de compañeros de trabajo o el rechazo de peticiones razonables de un empleado.

Es importante que los empleados sepan que tienen el derecho a trabajar en un ambiente libre de acoso. Si los empleados sienten que están siendo acosados, deben informarlo a su empleador. Aunque todos los empleadores tienen la responsabilidad de crear un ambiente de trabajo seguro y respetuoso, los empleadores también deben asegurarse de investigar los reclamos de acoso y tomar las medidas necesarias para prevenir que vuelva a ocurrir.

¿Qué se considera acoso en el trabajo?

El acoso en el trabajo es una realidad que debe tomarse con seriedad. Se considera acoso laboral toda conducta abusiva, hostil, intimidatoria o degradante que se desarrolle en el ambiente laboral de una empresa, entre un empleado y su jefe u otro compañero de trabajo. Estas conductas abusivas pueden darse en forma de comentarios, acciones, gestos, ofensas, insultos, denigración, burlas, amenazas, entre otros. Además, el acoso laboral puede darse a través del uso de herramientas electrónicas, como el correo electrónico, las redes sociales o los mensajes de texto.

En México, el acoso laboral se encuentra regulado por el artículo 123 de la Constitución, el cual establece que el trabajo debe ser libre de toda forma de acoso. Esto significa que los empleadores deben garantizar un ambiente laboral seguro y saludable, donde se respeten los derechos humanos y las libertades fundamentales de los trabajadores.

No solo la Constitución contempla el acoso laboral, sino que también hay leyes específicas al respecto. El Código Federal de Trabajo establece que toda conducta que atente contra la dignidad de un trabajador es considerada acoso laboral. Esta conducta se considera una falta graves y las sanciones pueden incluir el despido del trabajador y el pago de daños y perjuicios.

Es importante destacar que el acoso laboral no solo es una violación de los derechos humanos, sino que también puede causar problemas de salud física y mental en los trabajadores. Por lo tanto, es importante que los empleadores tomen medidas para prevenir el acoso laboral y garantizar un ambiente de trabajo saludable.

¿Cómo se puede demostrar acoso laboral?

El acoso laboral se puede definir como un comportamiento o actitud negativa o hostil por parte de alguna persona directamente relacionada con el trabajo. Estas conductas pueden ser verbales o físicas, y pueden tener un efecto negativo en la vida laboral del afectado. Una vez que una persona sospecha que se está viendo afectada por el acoso laboral, es importante que documente todas las interacciones y comportamientos negativos para demostrar la situación.

Uno de los primeros pasos para documentar el acoso laboral es mantener un registro de todas las interacciones con el acosador. Esto puede incluir correos electrónicos, conversaciones telefónicas, notas o cualquier otra evidencia relevante. Estos registros deben ser detallados y consignar la hora, el lugar y los detalles de la situación.

Es importante que se respalde la documentación del acoso laboral con el testimonio de testigos. Esto puede incluir compañeros de trabajo, otros supervisores o cualquier otra persona que haya presenciado la situación. Los informes de los testigos deben ser lo más detallados posible para reforzar la evidencia existente.

Otra manera de documentar el acoso laboral es reunir pruebas físicas. Esto puede incluir documentos, fotografías, grabaciones de audio, videos o cualquier otra evidencia relevante. Estas pruebas deben ser recopiladas para reforzar las acusaciones de acoso laboral.

Finalmente, hay que recordar que documentar el acoso laboral es un proceso continuo. A medida que surjan nuevas situaciones, es importante documentarlas y mantener un registro de todas las interacciones. Esta documentación servirá como prueba en un tribunal, si el acoso laboral llega a tanto.